Luis Vicente León, presidente de Datanálisis, analizó el impacto potencial de la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos en Venezuela.
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Según León, si se considera la experiencia pasada de Trump, se podría esperar una mayor radicalización contra el gobierno de Nicolás Maduro, con sanciones personales y sectoriales, retroceso en las negociaciones económicas y una tendencia al aislamiento.
Sin embargo, León destacó que Trump es impredecible, y proyectar su acción futura basándose en su pasado es riesgoso. “El mismo Trump ha dicho que cometió errores graves con Venezuela, Rusia e Irán. Ha manifestado que las sanciones no cumplieron su objetivo. Ha culpado a sus colaboradores de corte radical del fracaso de su política frente a Venezuela, por lo que proyectar su acción futura en función de lo que él mismo ha desdeñado resulta atrevido”.
El analista político considera que el cambio de enfoque en el discurso de campaña de Trump, de la ausencia de democracia al tema migratorio, podría llevar a una concentración en este tema, con acciones efectistas. Esto podría generar una posición ambigua hacia Maduro, sin reconocer un gobierno alternativo, dejando espacio para futuras negociaciones.
“La concentración en el tema migratorio se enfrentará a la realidad concreta de que la ley dificulta cualquier posible estrategia de deportación de venezolanos, sin relaciones diplomáticas, ni vuelos directos, ni acuerdos migratorios. La presión que habrá en ese país será más bien a otorgar permisos de permanencia a los venezolanos en Estados Unidos para proteger su integridad, lo cual sería contradictorio a la promesa de Trump”, dijo.
León concluyó que es probable que Trump busque un acuerdo migratorio con Maduro, abriendo las puertas a futuras negociaciones, y que ambos podrían presentar esto como un logro propio. No obstante, la impredecibilidad del estadounidense impide tener certeza sobre lo que sucederá en los próximos meses.