Condenado a más de 14 años de cárcel un exsoldado británico acusado de espiar para Irán

Condenado a más de 14 años de cárcel un exsoldado británico acusado de espiar para Irán

Daniel Abed Khalife.AFP

 

El exmilitar británico Daniel Khalife fue condenado este lunes a 14 años y tres meses de cárcel en Inglaterra por infringir las leyes de secretos oficiales y terrorismo al recopilar información sensible para pasarla a agentes secretos de Irán.

La jueza Bobbie Cheema-grubb dijo en el tribunal londinense de Woolwich que los actos de Khalife, de 23 años y de quien se alegaron trastornos de personalidad, plantearon un riesgo “de moderado a alto, más que mínimo o grave”.





 

 

La pena total es por varios delitos, incluido la huida en septiembre de 2023 de prisión preventiva bajo un camión de suministros alimentarios, y se cumplirá consecutivamente, indicó.

Al dictar sentencia, la magistrada observó que el joven, de madre iraní y padre libanés, que cometió los hechos cuando tenía de 17 a 20 años, pudo haberse convertido en “un soldado ejemplar” pero en su lugar se comportó como un “tonto peligroso” con su trama “fantasiosa” para traicionar al Estado.

Su motivación fue principalmente “un deseo egoísta de alardear”, apuntó.

La jueza consideró probado que Khalife, que expresó su aspiración de ser agente doble, “recibió pagos en dos ocasiones y se desplazó para encontrarse con agentes de la inteligencia de Irán en Turquía”, a quienes en algún caso dio información falsa.

Además, recabó “una gran cantidad de información”, como el nombre de otros colegas del Ejército, que seguramente planeaba remitir a Teherán.

En una audiencia previa, Khalife, natural de Kingston (al suroeste de Londres), fue absuelto de haber detonado una bomba falsa en unos barracones militares en los que servía, otro de los cargos que se le imputaban.

A lo largo del proceso, la fiscalía sostuvo que llevó a cabo un “juego cínico”, al mantener que quería ayudar a los servicios secretos británicos, a los que escribió, mientras recopilaba “mucho material restringido y clasificado”.

Su abogado defensor, Gul Nawaz Hussain, argumentó por su parte que las acciones de su cliente “difícilmente pasarán a las historia como lecciones para aspirantes a espía”, y las comparó con las de “007 o Scooby Doo”.

Hussain adujo que claramente no surgieron de su “mala fe, avaricia, fervor religioso o convicciones ideológicas”, sino de sus frustraciones personales y voluntad de destacar, y apuntó que no se tradujeron en ningún daño concreto.

Por EFE