
El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, partió este miércoles rumbo a Canadá en la visita de más alto nivel de la administración de Donald Trump al país vecino.
Rubio participará en la reunión de ministros de Exteriores del Grupo de los Siete (G7), que se celebrará del 12 al 14 de marzo en Charlevoix, Quebec. Durante la cumbre, se discutirán temas clave como la guerra en Ucrania, el aumento de las tensiones comerciales y las amenazas de Trump sobre la soberanía canadiense.
El viaje del funcionario ocurre en un contexto marcado por la imposición de aranceles del 25 % de EEUU sobre el acero y aluminio canadienses, una medida que el primer ministro saliente, Justin Trudeau, calificó como una “amenaza existencial”.
Su sucesor, Mark Carney, ha alertado que Washington “quiere nuestros recursos, nuestra agua, nuestra tierra y nuestro país”, subrayando la inquietud en Ottawa ante las recientes declaraciones de Trump.
Rubio se unirá a los ministros de Exteriores de Canadá, Alemania, Francia, Italia, Japón y Reino Unido en la primera reunión del G7 desde el regreso de Trump a la presidencia. Aunque el principal tema de la cumbre es el apoyo a Ucrania ante la invasión de Rusia, EEUU ha generado controversia al desmarcarse de la posición tradicional del grupo.