Desfila en Cibeles el primer modelo albino

(Foto ABC de España)

Ha venido desde Nueva York para desfilar con Etxeberría porque se enamoró de sus prendas (y porque han pagado su caché de top internacional, claro). Ha desfilado para McQueen, Givenchy y hasta apareció en un videoclip de Katy Perry. Ser una “rara avis” dentro del mundo fashion le ha abierto muchas puertas. No es guapo, no es alto, ni tiene el cuerpo perfecto. Probablemente se rieran de él en la infancia y le miren por la calle. Pero atrae. Ross cerró el desfile y saludó con el diseñador y el modelo Sebastian Sauve, también perfecto para el aire de las prendas de Etxeberría, reseña el diario ABC de España.

El abrigo para que… “deje de ser una prenda discreta que de paso al traje, que se convierta en prenda principal”.

Antes no vendía y ahora sí. Hace repaso: cuatro tiendas en Nueva York, tres en París, una en Hong Kong, otra en Italia, en Rusia y en Philadelphia. Mientras le hacía la entrevista le informaron de que se sumaba una más en la Gran Manzana. Son los resultados de haber pasado por la feria Pitti Huomo en Florencia justo antes de estrenarse en Mercedes Benz Fashion Week Madrid. Aunque no es un desconocido en Ifema, participó en dos EGO y se llevó los premios, también dos OFF y ahora se suma a los “grandes”. Pero todo, todo, sale de su casa-taller, su laboratorio de ideas. Y de su bolsillo, asegura que no tiene subvenciones, ni inversores.





Con respecto a su salto a la moda femenina asegura que la mujer puede ponerse todo el vestuario del hombre, pero al revés no sucede así. ¿Su objetivo? “Que evolucione el armario masculino sin disfrazarlo ni hacer el ridículo”. Aunque hay un pequeño detalle que conviene conocer… “El abrigo lo he trabajado sin pensar en el género”, y todos con patronaje masculino.

36 abrigos. Y muchas “flipadas”, como él mismo las define. Hay uno al que llama cariñosamente el “paracaídas de pelo”.Los materiales son la pasión del diseñador. Lanas de doble faz, barriga de zorro, cabra tibetana, paño… “No hay nada artificial”. No escatima en eso. No podría, parece que de tener que hacerlo se dedicaría a otra cosa. Para comprar algo de Etxeberria puede ponerse en contacto con él. Sus abrigos oscilan entre los 1000 y los 6000 euros.