Dan de alta a la Jueza Afiuni

Foto: Archivo
La jueza María Lourdes Afiuni se encuentra en su residencia para continuar un tratamiento tras una intoxicción por la que habría sido hospitalizada en un centro clínico de la capital. Según informó su hermano, Nelson Afiuni, a la jueza le dieron de alta y se le practicaron todos los exámenes que necesitaba.

Sin embargo, refirió que en el ovario que le queda fue detectado un quiste funcional que debe ser tratado durante tres meses y, en caso de no reducirse, podría requerir una intervención quirúrgica.

 

 





Afiuni fue acusada de corrupción, abuso de autoridad y favorecimiento para la evasión de detenido por la liberación en diciembre de 2009 de Eligio Cedeño, un empresario que llevaba tres años detenido sin juicio, acusado de efectuar operaciones cambiarias ilegales.

En ese entonces, el presidente venezolano, Hugo Chávez, pidió la “pena máxima” para la magistrada, que se encuentra desde febrero de 2010 bajo prisión domiciliaria y con prohibición de declarar a la prensa.

“Su situación está absolutamente estable”, añadió el jurista sobre la salud de Afiuni, y explicó que la magistrada presenta “eritemas” en su cuerpo.

Indicó que se autorizó, además, que a Afiuni “se le revisen todas y cada una de las afecciones físicas” que sufre, entre las que citó problemas de ovarios y quistes.

“Va a ser vista por un ginecólogo, por un alergólo, por un urólogo de su confianza, quienes (…), una vez que le hagan los exámenes, van a poder determinar cuál es tratamiento a cada una de las afecciones”, explicó.

Graterol confirmó, por otra parte, que el lunes continuará el juicio contra Afiuni en su ausencia, en aplicación del nuevo Código Orgánico Procesal Penal (COPP), que permite el inicio de estos procesos sin el imputado.

El defensor se quejó de la “lentitud” con la que se desarrolla el juicio que se inició en diciembre del año pasado, al advertir que de 43 testigos previstos han sido citados dos en cada una de las tres audiencias celebradas hasta ahora, lo que, según él, llevaría a extender este proceso a unos 20 meses.

“Esa lentitud (…) lo que está generando es que se le aplique a la doctora Afiuni la pena de banquillo o una pena anticipada”, advirtió Graterol, quien detalló que el delito de corrupción propia, que consideró el “más grave” por el que se le acusa a la magistrada, establece una pena de entre tres y seis años. EFE