Nosotros siempre hemos mantenido una posición frontal respecto a las garantías electorales, hemos denunciado cada abuso cuando se ha producido, aunque no haya respuesta oficial. Para dejar un precedente ante el país y ante el mundo de un sistema electoral donde la equidad, el respeto a las reglas del juego y el papel regulatorio del Consejo Nacional Electoral son los grandes ausentes.
Por el contario tenemos lo que consideramos una constante provocación de alguna de las autoridades electorales para causar un efecto desmovilizador en una parte del país. Nosotros no consideramos que la abstención sea una forma de protestar, la consideramos una forma de entregarse sin luchar. Quienes creemos en la democracia solo tenemos el voto como arma.
Sabemos la posición que está jugando el CNE en este momento, por eso no vamos a seguirle el juego a quienes en lugar de promover la participación, juegan a incentivar la abstención. Aquí tenemos un sistema electoral profundamente perverso en sus condiciones, antidemocrático, como lo ha reconocido el propio rector Vicente Díaz, donde no se aplica la Ley Electoral, se aplica la Ley del Embudo, es decir, lo ancho es para el gobierno y lo angosto para la oposición.
Creemos que se deben exigir garantías en lo técnico, pero lo fundamental, lo que queremos que la gente sepa, es que si cada elector es capaz de defender su voto hasta el final no habrá manipulación posible ¿Cómo lo vamos a defender? Hay que estar presentes en las auditorias ciudadanas, eso es un derecho que tenemos, hay que apoyar a nuestros testigos, que muchas veces son amedrentados. Si hay ciudadanos en los centros no es posible sembrar miedo.
Ellos no respetan la institucionalidad, pero nosotros estamos en la obligación de exigirlo. Que las elecciones sean expresión de la voluntad general depende de todos. Si se impone una parte del país a fuerza de real y abusos el triunfo es desde todo punto de vista espurio.
Es trabajo de todos que este 14 de abril y en lo que queda de campaña luchemos para que se cumplan estas condiciones mínimas:
-Que la estación para información al elector no entorpezca y retrase el proceso electoral.
-Que la Fuerza Armada Nacional mantenga una posición institucional y que la mayoría de los oficiales se deslastre de la denuncia que ha hecho el Comando Simón Bolívar sobre un plan de movilización a favor del PSUV.
-Que el CNE, como órgano regulador, ponga freno al acompañamiento de electores por parte de testigos del PSUV. Solo se puede acompañar una persona, esto se convierte en un mecanismo para intimidar a los electores que se encuentran en las misiones.
-Que se frente el proselitismo y la intimidación en los alrededores de los centros de votación, sobre todo al momento de la auditoria ciudadana.
-Equidad en los medios públicos en la cobertura del proceso electoral. Basta que unos medios que pagamos todos sean tribuna para la descalificación del contrario. Desde el 8 de marzo al 31 de marzo 46 horas y 43 minutos dieron a favor del candidato Maduro y a penas 1 minuto y 18 segundo a Capriles. Si esto no es desequilibrio ¿Cómo se llama rectora Lucena?
No nos van a desmovilizar, no van a lograr que el pueblo se exprese. Con sus vicios, con sus abusos lo que provocan es que la gente salga con muchísima más fuerza. Puede que ellos peguen más fuerte con todos los poderes a su favor, pero nosotros tenemos al pueblo y al tiempo como aliados.
El llamado es a votar, cualquier irregularidad debe ser denunciada. ¡Todos a manifestar nuestra voluntad firme y decida de cambiar con Henrique Capriles Radonski! Sin miedo, sin cansancio, sin dormirnos. Actívate por ti y por los tuyos.
Brian Fincheltub
@Brianfincheltub