El “pajarito” que encarna el espíritu de Chávez, según Maduro, es un pito güé

Maduro y el pajarito (Foto Afp)

«¡Miren qué bonito, me lo regaló una compatriota de Nicaragua!», comentaba hace unos días Nicolás Maduro mostrando un sombrero de paja adornado con un pájaro de vistosos colores (amarillo, negro, pardo) durante uno de sus mítines, publica abc.es.

Nicolás Maduro, nuevo Presidente de la República Bolivariana de Venezuela tras ganar a Henrique Capriles, candidato que aglutina a las fuerzas de la oposición, en las elecciones del domingo, se refería al pito güé, cuya característica principal, su grito agudo y prolongado, le ha granjeado varios nombres: benteveo; quetubí, pitaguá; pitojuan… Cada persona cree escuchar una palabra diferente saliendo de su pico.

A pesar de no ser un buen cantor, destaca por su «locuacidad». Quienes comparten hábitat con él (las sabanas, las praderas, las estepas, las sierras y las selvas tropicales de América) identifican su voz sin dificultad. La población de pito güé, que se extiende desde Texas (EE.UU.) hasta Chile, en principio, se encuentra fuera de peligro, según BirdLife Internacional. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) cataloga al benteveo como «Especie bajo preocupación menor».





El pito güé es muy hábil a la hora de llenar el buche. Cuando otea una presa desde el aire se lanza rápido sobre ella, como un halcón (con el cuerpo en ángulo de 45º). Y cuando se fija en un renacuajo o pequeño pez cerca de la superficie se transforma en un martín pescador (aletea sobre el agua sin zambullirse). Aunque es, sobre todo, insectívoro (razón por la que resulta complicado criarlos en cautividad como mascotas) no le hace ascos a los gusanos, los reptiles, los pichones, la fruta…. Gracias a su dieta, el benteveo ayuda a diseminar las semillas del laurel, del ligustro y de la tala, por ejemplo.

Hostil

Durante la corta campaña electoral se ha hablado mucho del «pajarito» del líder del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Maduro, y de su compañera Cilia Flores. Ya que Capriles no ha presentado en sus intervenciones públicas a posible primera dama alguna.

Los pito güé no esconden su amor. Cuando macho y hembra se eligen, rozan sus pechos, mantienen erguidas sus cabezas, aletean contra las ramas y lanzan fuertes gritos. Y ambos, entre los que no se evidencia diformismo sexual, construyen juntos el nido.

El benteveo pertenece al orden de las aves paseriformes (de pequeño tamaño). Y dentro de éstas, al suboreden de los tiránidos, pues, anque es amistoso por regla general, se muestra hostil contra los predadores y competidores que ponen en jaque a su prole y su territorio.

Pájaro «malo»

 Para los guaraníes, pueblo sudamericano que ocupa algunas demarcaciones de Paraguay, Argentina y Brasil, el benteveo nunca miente. Hay quien lo considera un pájaro de mal agüero por ese motivo y dependiendo de a qué hora cante (por la mañana anuncia «embarazo» y por la noche, «casamiento») y de dónde lo haga (si es cerca de la casa avisa de una próxima «visita» de parientes; si lo hace sobre el techo de la casa significa «discordia» familiar).
Una leyenda guaraní asegura que el benteveo es la reencarnación de Sagua-á, un niño de ocho años que se portaba fatal con su abuelo. Cuando éste estaba a punto de fallecer pidió un vaso de agua a su nieto: «Mi vida se apaga como un pito güé». El chico no solo no auxilió a su yayo, sino que se burló de él, repitiendo las últimas palabras del anciano. Cuando los padres de Sagua-á regresaron a casa tras una dura jornada en el campo encontraron el cadáver del abuelo y a un pájarito que no hacía más que repetir «pito güé».