Cacería de brujas en entes públicos

(Foto La Verdad)

Los recientes resultados emitidos por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que dieron como ganador de la presidencia a Nicolás Maduro por un estrecho margen de votos, impulsaron una persecución político-laboral en los organismos e instituciones públicas.

La cacería se inició con fuerza dentro de las diferentes dependencias de la Gobernación del Zulia, a cargo de Francisco Arias Cárdenas, mandatario apegado a los ideales del presidente proclamado. Allí ya empezaron los despidos de trabajadores no alineados al oficialismo.

Solo el martes fueron seis las personas botadas de la Fundación Servicio de Atención del Zulia 171 (Funsaz 171), aseguró José Rojas, uno de los empleados que resultó desincorporado de la nómina del Ejecutivo regional por su tendencia política.





“La carta de despido nos llegó el martes. Nos dijeron que lamentablemente teníamos que firmarla. La carta nos llegó a seis personas. Nos dijeron que teníamos que salir de la fundación”, contó el joven, que se desempeñaba como auxiliar de farmacia.

Desde el martes, el personal desincorporado debe asistir diariamente a la Oficina Central de Personal de la Gobernación (OCP), ubicada en el casco central, a firmar una suerte de asistencia.

“No hay palabras para describir lo que se siente. Yo di todo para la fundación, cumplí siempre con todas mis obligaciones, ahora me salieron con esta patada. Tenía ocho años trabajando allí”.

Rojas contó que tuvo que asistir a todas las concentraciones políticas que se hicieron en la región para promover la candidatura de Maduro, incluso le tocó trabajar para ocultar los logos de las camionetas de la institución cuando se utilizaron para actos de campaña.

“Nunca dije que estaba a favor de Maduro. Fui obligado a todas las concentraciones. Siempre estuve a favor de (Henrique) Capriles”, aseguró sin miedo.

Afirmó que no se arrepiente de su tendencia política. Confió en que en el futuro tendrá un empleo en el que no se le cuestione su preferencia. Destacó no estar dispuesto a dejar de votar.

Más información en el diario La Verdad.