Unidad: Las universidades son objeto de una brutal agresión gubernamental

(Foto Efe)

La Mesa de la Unidad Democrática  expresó en un comunicado su apoyo ante “las graves denuncias que las autoridades de las universidades nacionales, profesores y alumnos han formulado, exponiendo la política de aniquilación de estas instituciones que adelanta el Gobierno Nacional, para alcanzar su control ideológico total”.

Destaca que “la autonomía universitaria no es un regalo del gobierno, sino atributo propio del quehacer universitario y está reconocida y consagrada en la Constitución (art.109). Pertenece a todas las universidades  y es variada de acuerdo con sus estatutos  y condición de “autónomas”, “experimentales” o “privadas”. La autonomía exige compromiso con el país  plural y coordinación con los gobiernos, sociedad y empresas”.

Comunicado





La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) ante la ya muy prolongada crisis de las universidades autónomas venezolanas, hace del conocimiento a la opinión pública nacional lo siguiente:

La MUD apoya las graves denuncias que las autoridades de las universidades nacionales, profesores y alumnos han formulado, exponiendo la política de aniquilación de estas instituciones que adelanta el Gobierno Nacional, para alcanzar su control ideológico total.

En los últimos años las universidades sobre todo las “autónomas” son objeto de una brutal agresión gubernamental y de un cerco financiero e ideológico que busca su sometimiento servil.

La MUD respalda decididamente la autonomía universitaria, la participación en todas las instancias de cogobierno, la libertad del debate ideológico plural y la recuperación del financiamiento universitario de acuerdo con sus necesidades.

La autonomía universitaria no es un regalo del gobierno, sino atributo propio del quehacer universitario y está reconocida y consagrada en la Constitución (art.109). Pertenece a todas las universidades y es variada de acuerdo con sus estatutos y condición de “autónomas”, “experimentales” o “privadas”. La autonomía exige compromiso con el país plural y coordinación con los gobiernos, sociedad y empresas.

Reconocemos y propiciamos la participación plural en el libre debate de las ideas y en las instancias de cogobierno universitario en todas las universidades sin excepción.

La MUD asume como objetivo aumentar el acceso a la universidad y la prosecución exitosa en los estudios para que el título que se expida al final de cada carrera esté respaldado con un contenido de calidad y el venezolano esté en condiciones de éxito en su trabajo productivo y en capacidad de comprometerse y aportar al desarrollo del país que lo forma.

Docencia e investigación

Todas las universidades requieren plena dedicación de personas altamente cualificadas y capacitadas para formar y realizar la investigación que el país necesita. Ahora bien, la universidad no es uniforme, ni por el tipo de carrera, ni por sus énfasis y misión específica: se necesitan carreras más cortas y más largas, carreras especialmente vinculadas a oficios productivos con alta preparación, y también aquellas que concentran esfuerzos en necesidades locales y regionales.

Hay universidades con más énfasis en la docencia y otras con más en la investigación. También se diferencian por el modo de financiarse y por sus estatutos de “autónomas”, “experimentales” y “privadas”. No son contradictorias entre sí, sino complementarias y aliadas para así ofrecer la formación profesional y la investigación que el país y las regiones necesitan. Se requiere también una política para poner al servicio del país los talentos de los universitarios venezolanos actualmente radicados en el exterior para estimular el regreso de quienes han emigrado, y también la conformación de redes de colaboración en los conocimientos con quienes decidan permanecer en el exterior.

Financiamiento.

La universidad es costosa y la calidad universitaria requiere cuantiosas inversiones y recuperarse del empobrecimiento producido en los últimos años. Todas las universidades requieren plena dedicación de una buena parte de su personal, administradores, investigadores y docentes altamente cualificadas y capacitados a la formación de los jóvenes y a la investigación que el país necesita. Nada de esto es posible con los actuales sueldos y presupuestos.

a) Proponemos la urgente recuperación de la idea original de la LOCTI, que promueve la responsabilidad y la alianza entre el presupuesto oficial y el aporte de empresas, públicas y privadas, y que satisface los requerimientos de investigación y desarrollo de éstas con las capacidades que construyen las universidades. Alianza estratégica para significativas y crecientes inversiones en la investigación, de acuerdo con las necesidades de las empresas y de la nación en un mundo tan exigente y competitivo.

El mundo universitario necesita estímulos a la productividad académica, mayor transparencia administrativa y mayor eficiencia por cada bolívar invertido, pues es necesario hacer más y mejor con recursos que son escasos para que todos los jóvenes puedan acceder a su formación post-secundaria en modalidades más vinculadas a sus trabajos y empresas y en alianza con el mundo universitario.

b) Proponemos la formación de educadores y el compromiso de la universidad venezolana con todo el sistema educativo desde la educación inicial. Ello requiere la promoción masiva de jóvenes educadores y al mismo tiempo programas específicos de actualización de los educadores en ejercicio y de refuerzo a las escuelas, sobre todo a las más necesitadas.

c) El presupuesto público debe garantizar las actividades investigativas y el desarrollo de los centros de investigación del Estado venezolano. También se debe estimular y exigir la participación de las empresas públicas y privadas en este esfuerzo.

d) La jubilación prematura y la carencia de un sistema de jubilación universitaria independiente del presupuesto anual es un grave mal para la universidad y un riesgo para los jubilados actuales y futuros. Por eso proponemos la creación del sistema de jubilación digno y separado del presupuesto ordinario.

e) Actualmente dos de cada cinco graduados culminan sus estudios sin ayuda alguna del presupuesto oficial. En muchos casos ese autofinanciamiento viene de grandes sacrificios de familias de ingresos modestos. Tenemos buenas experiencias de gobiernos regionales que ofrecen becas para estudios universitarios en universidades no financiadas por el Estado. Proponemos a ampliar este sistema de becas y crear un sistema de crédito educativo público para centenares de miles de estudiantes que lo necesiten.

Solidaridad universitaria y compromiso público

Venezuela necesita que su inversión universitaria sea retribuida por el compromiso solidario, defensa de las libertades democráticas y la eficaz contribución al desarrollo nacional del sistema universitario y de sus egresados. Entendemos que es necesario reforzar en todas las universidades este sentido de su misión y servicio público y de solidaridad generacional, cada una desde su propia modalidad institucional.

Por eso fomentamos la aplicación más dinámica de la Ley de Servicio Comunitario Estudiantil y las alianzas de las universidades con los proyectos de las comunidades de menores recursos, así como el desarrollo de la capacidad de emprendimiento en las universidades, como vías para contribuir a la formación integral de nuestros estudiantes y para que se fortalezca la organización y capacidad productiva en las localidades, así como la alianza ética entre los profesionales y las comunidades.

Las misiones Ribas (bachillerato) y Sucre (universidad) ampliaron las posibilidades de los venezolanos y despertaron en muchos la esperanza de estudios universitarios. Cientos de miles fueron a universidades recién creadas y protegidas por el gobierno, pero la ilusión primera se ha convertido en fracaso y frustración para muchos a causa de la muy mala calidad, ninguna participación en el cogobierno y clima de proselitismo e imposición ideológico-política en esas universidades. En ellas es alarmante el altísimo porcentaje de jóvenes que no se gradúan por sentir que pierden el tiempo, o se cambian de universidad cuando pueden, o reciben el título sin adecuada formación.

Esos venezolanos tienen derecho a la universidad y la solución es darles formación de calidad que derive en empleo productivo y en su aporte al desarrollo nacional. Por ello en ninguna universidad se debe imponer una ideología política, sino fomentar la libre discusión de ideas y proyectos nacionales; y en todas debe haber participación en los cogobiernos.

Venezuela es uno de los países del mundo con más universitarios en relación al número de sus habitantes. Este ha sido el resultado de la ampliación de la cobertura en este nivel educativo que se ha producido desde 1936. Sin embargo, la calidad universitaria ha ido degradándose hasta niveles alarmantes y las esperanzas de muchos jóvenes que entran con ilusión terminan en frustración, abandono de sus estudios y desempleo.

Es por ello tan urgente el compromiso de las universidades por una educación de calidad, al servicio de las personas y las comunidades. La MUD será una aliada permanente de la lucha de las universidades venezolanas por la democracia y el bienestar de los venezolanos.

Prensa Unidad Venezuela