Conoce los beneficios de la mascarilla de Té Verde

El té constituye, después del agua, la segunda bebida más consumida en el mundo. Sus propiedades estimulantes y curativas hacen de esta rica infusión la predilecta de muchos.

A pesar de que el té se lleva bebiendo desde hace miles de años, las investigaciones científicas han comprobado recientemente que este milenario té contiene altos niveles de polifenoles, sustancias altamente antioxidantes, capaces de neutralizar los radicales libres, partículas principalmente responsables del proceso de envejecimiento de la piel. Sus otros compuestos como los aminoácidos y catequinas, mantienen a las células de la piel protegidas del proceso de oxidación y favorecen una profunda hidratación, como resultado del incremento en la captación de moléculas de agua. La piel quedará tonificada y fortalecida, gracias a la acción estimulante de colágeno y elastina que realiza el extracto de té verde.





Gracias a su capacidad de regenerar colágeno y de retrasar el envejecimiento, el té verde es considerado un elixir de juventud y forma parte esencial de muchos tratamientos de belleza, sobre todo los que buscan rejuvenecer la piel del rostro. En estos casos, el té es utilizado en forma de máscaras o mascarillas, las cuales, acompañadas de tratamientos de vitamina C y oxigenación, revitalizan, reparan, hidratan y nutren profundamente la piel.

Hoy en día, este tratamiento incluye en su realización una microdermoabrasión, que prepara a la piel para el proceso de hidratación que vendría a continuación. La dermis es hidratada a través de una digitopuntura manual, en la cual es aplicada un suero a base de vitamina C que garantiza una mayor absorción del producto. A esto le sigue la colocación de un velo de colágeno con té verde y vitamina C, para luego finalizar con una oxigenación.

La mascarilla de té verde puede ser aplicada sobre cualquier tipo de piel, sin embargo, si se desea reparar profundamente daños existentes, la combinación perfecta para este tratamiento es la radiofrecuencia con el novedoso equipo Blue RF System, que aplica un haz de luz azul sobre la piel penetrando la barrera de los melanocitos basales de la epidermis, calentando las fibras de colágeno dérmico a 55°c-65°c para estimularlo. Con esto, se logra un efecto de reorganización y contracción de las fibras de colágeno para estirar la piel flácida, eliminando las arrugas y disolviendo la grasa subcutánea, sin requerir recuperación u otras precauciones después del tratamiento.

La composición del té verde rica en vitaminas E y C y su gran variedad de minerales (calcio, hierro, zinc, sodio,etc) hacen de este tratamiento y de la radiofrecuencia, las mejores alternativas para nutrir y rejuvenecer pieles desvitalizadas.