Reaparición de Fidel Castro avala al núcleo más reaccionario, según el exilio

El exilio cubano en Miami consideró hoy que la reaparición en público del expresidente cubano Fidel Castro busca reforzar el “statu quo” del régimen castrista y “avalar” al núcleo más reaccionario de la nomenclatura burocrática. EFE/ Emilio J. López

“Desaparecido” de la escena pública desde abril de 2013, la reaparición de Castro este jueves es asimismo, según varios activistas del exilio, un “recordatorio” de que “todavía ejerce influencia” y pude frenar “cualquier reforma” que no sea de su conveniencia.





La vuelta a la escena pública de Castro, de 87 años, acalla rumores sobre su estado y, a la vez, “es un gesto bien demostrativo de que está todavía vivo y ejerce influencia en el país”, dijo a Efe Pedro Corzo, director del Instituto Cubano contra el Totalitarismo.

Según Corzo, el mensaje que dio Castro, que acudió a la inauguración de un estudio de arte en La Habana, es por un lado de “estabilidad del régimen” y por otro de advertencia frente a cualquier intento de desmontar “a los denominados moncadistas”, el núcleo más reaccionario dentro del poder.

El hecho de que Castro, retirado del poder desde 2006, volviese a a la escena pública el día en que se cumplían 55 años de su entrada en La Habana comandando el Ejército Rebelde no es una mera coincidencia para este analista.

Para Corzo, se escogió ese día para avalar los mecanismos de “continuidad del régimen” y la premisa de que “cualquier ajuste que vaya a hacer (el presidente) Raúl Castro debe ser de la conveniencia de la nomenclatura que ha impuesto su voluntad por 55 años”.

En opinión de Ramón Saúl Sánchez, presidente del Movimiento Democracia, la “exhibición” de Castro es una “estrategia” y una “manera de atemorizar a aquellos que piensan en reformas” de mayor calado al considerar que el expresidente cubano “no tiene capacidad de detener el proceso” de transformación.

Desgraciadamente, precisó a Efe Sánchez, se trata de un proceso de transición hacia el “continuismo de la dictadura presidida por Raúl” Castro y no hacia la democracia y la constitución de una sociedad abierta.

Además, prosiguió, “cada vez se hace más obvio que, en algún momento, va a salir la noticia de que Fidel Castro ha fallecido, y eso va a incidir en la dinámica política cubana”.

Pero, de momento, en un intento de dotar de mayor estabilidad al régimen, “lo exhiben como quien exhibe un arma mortífera”, a la vez “aval de los conservadores de la revolución que quieren el continuismo”, apostilló Saúl Sánchez.

En este contexto, la nueva aparición de Fidel Castro arroja luz sobre el escenario político actual al reforzar los mecanismos del “statu quo en el poder y a los que le siguen”, pese a que el número de “desafectos al Gobierno es una cosa ya masiva”, subrayó Tomás Rodríguez, director de Agenda Cuba.

Aseguró a Efe que Fidel Castro es una “figura utilizada por quienes quieren permanecer en el sistema y defienden la continuidad de éste”, al tiempo que “aumenta la represión contra una oposición que ha ido creciendo”.

Los tres activistas del exilio coincidieron en que en las fotografías de la exposición de pintura a la que asistió “se ve a Castro gastado, camino hacia el fin de la vida, como todo ser humano, y ese fin está cerca”.

Sin duda, su muerte “incidirá en algún nivel en el destino del régimen: va a tener algún impacto, aunque no definitorio”, dijo Saúl Sánchez, para quien otra “estrategia adicional”, trazada con su reaparición pública, es “acostumbrar a los cubanos a largos espacios de ausencia” del líder histórico.

“Lo mueven y lo esconden en un intento por demostrar que no sólo está vivo, sino que ejerce todavía influencia” en el devenir del país, subrayó Rodríguez.