Gustavo Coronel: Traidores, oportunistas y “asépticos”

thumbnailgustavocoronelEl régimen venezolano debe y puede caer pero hay tres grupos que lo apuntalan, de manera intencionada o de buena fe: los traidores, los oportunistas y los “asépticos”.

 

Los traidores:





 

1.      La FF.AA. venezolana, como institución, la cual ha abandonado su misión y valores para apoyar un régimen arbitrario, inepto y corrupto. Actualmente el régimen venezolano representa una dictadura militar.

 

2.      La OEA, especialmente el Sr. José Miguel Insulza y los invertebrados representantes de los países de América Latina, quienes hablan de “no intervención” como excusa para mantener en el poder a un régimen que les ha dado mucho dinero y con el cual se identifican en su enfermizo complejo de inferioridad frente a los Estados Unidos. Venezuela tiene comprado un bloque en la OEA, formado por los gobiernos parásitos del ALBA y del Caribe, los cuales reciben enormes subsidios petroleros del régimen. La OEA ha sacrificado la Carta Interamericana en el altar de la no-intervención, permitiendo – eso sí – la intervención Cubana en Venezuela y la intervención Venezolana en los procesos internos de los países de la región: Paraguay, Honduras, Argentina, etc. Los Estados Unidos y Canadá deberían retirarse de esta organización, la cual – paradójicamente – es esencialmente financiada por ellos.

 

3.      Los funcionarios públicos entregados al régimen, desde ministros hasta embajadores, seres desvergonzados y con los bolsillos llenos del dinero venezolano

 

Los  Oportunistas.

 

Líderes políticos venidos a menos, figuras menores de los partidos políticos en la MUD y algunos formadores de opinión impulsados por la codicia llaman al “diálogo”, a la reconciliación entre ciudadanos decentes y el malandraje oficial, como si el aceite y el vinagre pudieran mezclarse. Y lo están haciendo mientras el régimen usa la represión, el insulto y la arrogancia para tratar de terminar con sus adversarios.  Desde Herman Escarrá hasta  Oscar Schemel,  hay un  grupo de venezolanos que  exhibe una creciente actitud de entrega a un régimen funesto. La historia se los reclamará.

 

 

 

Los Asépticos, en una campana de cristal.

 

El país está en llamas, hay violencia desatada por parte del régimen. Los Venezolanos protestan de la manera como pueden protestar. Pero hay quienes critican cualquiera manifestación de rebeldía por parte de quienes adversan al régimen. Les horroriza una barricada, critican a quienes rehúsan poner la otra mejilla. Es cierto que nadie desea una guerra civil  pero no se puede tratar de desmontar la protesta porque alguien tiró una piedra o cerró una calle. Una insurgencia ciudadana no es un desfile de carnaval.  Hay compatriotas quienes desean una estricta adhesión a sistemas electorales, los cuales solo funcionan bajo un estado de derecho. Ese no es el caso de Venezuela.

Frente a estos grupos que apuntalan el régimen de Castro/ Maduro se alzan en todo el mundo  las voces de individualidades, organizaciones libres y países dignos que reclaman una Venezuela democrática. Y en Venezuela hay miles de venezolanos de todas las clases sociales que están luchando, no solo contra el régimen sino contra los traidores, los oportunistas y los asépticos.  Nadie  puede permanecer indiferente ante nuestra tragedia. El silencio y  la insistencia en el uso de guantes blancos frente a la barbarie son factores que apuntalan al régimen.