El Nuevo Herald: Gobierno de Maduro intimida y amenaza a los que hacen denuncias

El Nuevo Herald: Gobierno de Maduro intimida y amenaza a los que hacen denuncias

En Zulia, un estudiante recibe una llamada en su celular cuando estaba en una tienda de autopartes, la persona le describe la ropa que él viste y procede a advertirle que si no deja de utilizar su cuenta de Twitter para hacer denuncias, lo van a matar.

Antonio María Delgado / El Nuevo Herald

En Caracas, un abogado es interceptado en la calle. El agresor le encañona por la espalda con un arma de fuego y luego desaparece. Posteriormente, el jurista se entera que a su asistente le habían hecho exactamente lo mismo, a la misma hora, en otra zona de la ciudad. El mensaje dirigido a ambos es muy claro: si no dejan de hablar en defensa de los presos políticos un día cercano encontrarían sus cadáveres en la calle.





En Barquisimeto, un ingeniero manejaba su auto con su esposa al lado. Súbitamente, son obligados a detenerse por patrullas del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin). Al corroborar su identidad, se lo llevan detenido. ¿Su crimen? Advertir públicamente sobre los problemas de generación eléctrica en la Represa del Guri, y la posibilidad de que este año se produzcan más interrupciones en el servicio.

Hablar nunca ha sido tan arriesgado en Venezuela, en momentos en que la Revolución Bolivariana incrementa el uso de prácticas intimidatorias para tratar de silenciar toda crítica contra el régimen de Nicolás Maduro.

En el caso de Luis Vásquez Corro, presidente de la Comisión Eléctrica del Colegio de Ingenieros del estado Lara, su arresto durante el pasado fin de semana denota nuevamente como el régimen hace uso del sistema judicial como instrumento de persecución política, explicó desde Miami Patricia Andrade, presidenta de la ONG Venezuela Awareness.

“Lo único que el hizo fue dar una opinión en base a sus conocimientos como experto y se lo llevaron preso”, dijo Andrade.

“Están criminalizando la opinión en Venezuela y el criterio que están utilizando sobre lo que se puede o no se puede decir es el de la ‘Revolución’. Eso es gravísimo, porque ahora cualquier opinión desfavorable para el régimen puede conducir a una persona a prisión”, señaló.

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