Conversamos con María Corina Machado en su vista a la península de Paraguaná en el Estado Falcón. La dirigente de Vente tiene hace tiempo una medida cautelar de prohibición de salida del país, al igual que las recientes dictadas por la jueza 12ª de juicio, María Eugenia Núñez, a 22 miembros de los medios La Patilla. Tal Cual y El Nacional. Buscamos su impresión sobre ese tema y otros de interés nacional.
L.P: Qué significa el más reciente ataque a la libertad de expresión del régimen prohibiendo la salida del país a más de veinte directivos, comunicadores y titulares de medios de comunicación?
MCM: La arremetida contra lo que queda de prensa libre, contra los que han demostrado ser indoblegables, representa el zarpazo desesperado de un régimen que se desmorona y que cree -erróneamente- que con ello puede tapar la realidad: la presencia de un estado mafioso y fallido que ha provocado una crisis humanitaria en Venezuela, la cual ya se evidencia con distintas facetas. La primera, es la pérdida del control del Estado en materia de seguridad ciudadana y orden interno. Ya no es solo en las fronteras, también en el centro del país: San Vicente, Turmero, Ocumare del Tuy….zonas tomadas por grupos irregulares equipados con armas de guerra; pranes, colectivos y bandas criminales, que al igual que los grupos guerrilleros que operan en Cabruta, Bolívar, en pleno corazón de Venezuela, someten a la población cobrando vacunas a comerciantes, empresarios y vecinos. Incluso, en Caracas, vemos como tienen azotados a la gente en Filas de Mariche. Un régimen incapaz de mantener el orden interno que tampoco defiende la integridad del territorio, la prueba es el atentado a nuestra reclamación en el Esequibo.
Otra faceta dantesca, es el colapso del sistema de salud pública. Mientras ciudadanos se mueren de mengua porque no hay medicinas, ni equipos, ni médicos, el Ministro miente descaradamente y afirma que “solo se han ido 320 médicos del país en seis años”, cuando todos sabemos que son más de 10 mil. Y crean un “sistema integral de acceso a medicamentos” para controlar la distribución de lo que no existe, ni existirá ….
Añade a todo esto el caos alimentario. Hace semanas advertimos que los inventarios estaban llegando a niveles alarmantes; hoy ocurre que en muchas zonas, especialmente del interior del país, ya no hay colas en ciertos momentos, porque sencillamente no hay qué comprar. Y finalmente, el desastre de los servicios…los jerarcas del régimen se llenan la boca arengando contra la privatización, pero en Bolívar, Sucre, Anzoátegui, Monagas, la gente tiene que pagar más de 1.800 bolívares por un camión de agua!
Vivimos una situación gravísima, pero el país no se entera de lo que está pasando en otro sitio que no sea su comunidad; y como la situación se agrava cada día, y se agudiza la crisis humanitaria, el régimen pretende enterrar, al costo que sea, la información.
L.P: Usted habla de crisis humanitaria, pero la gente, agobiada por su propia urgencia, no percibe una situación nacional tan crítica, mientras el gobierno califica como desestabilizadoras estas denuncias
MCM: Es así; muchos venezolanos no tienen información sobre lo que está pasando en el país en este momento. Por ejemplo, es inconcebible que el Municipio Falcón, en Paraguaná, esté sumergido en el caos que hoy allí se vive y que el resto del país no esté al tanto de ello. Hay pueblos que llevan más de un mes sin agua y 15 días sin luz. La comida se echa a perder y las neveras y artefactos se les dañan. La gente ha salido desesperada a las calles, de día y de noche. La gobernadora y el alcalde se esconden. Ya no hayan a quién culpar. Es desgarrador escuchar los testimonios enardecidos de las mujeres en Los Taques, Amuay, Pueblo Nuevo, el Supí. Es el legado de un régimen que con la mayor fortuna petrolera de nuestra historia se propuso someternos y devino en un estado fallido.
L.P: El régimen ha usado como excusa para acusar y perseguir a los medios, la información publicada sobre los negocios de Diosdado Cabello…
Claro, es la otra cara de este horror: el descalabro del Estado mafioso. Ante la ruina del país y el riesgo de que ya no puedan mantener sus negocios, tan turbios como cuantiosos; las facciones se enfrentan entre sí para rematar el saqueo del país: las mafias de los dólares preferenciales, los carteles de la droga, las tribus de los tribunales y de la extorsión judicial, del contrabando, del lavado de capitales. Es una dinámica insostenible y ante la implosión del Estado mafioso, buscan silenciar los únicos medios que han tenido la valentía de reflejar las entrañas de la podredumbre del régimen.
Impotentes ante la evidencia de sus crímenes develados en los medios internacionales, arremeten contra los medios de comunicación venezolanos y contra los ciudadanos que, arriesgándolo todo, incluso sus vidas y las de sus familias, se han mantenido firmes, de pie, preservando los principios que justifican la democracia, la libertad de expresión y la defensa de la información como derecho humano. Los editores, periodistas, directores, reporteros gráficos y columnistas de cada uno de estos medios que no claudican, demuestran que existe una enorme reserva moral que hará posible la construcción de la nueva Venezuela.
Venezuela tiene millones de héroes en los medios de comunicación, en los trabajadores, en las escuelas y universidades, en la sociedad civil, en las Fuerzas Armadas, que han mantenido con arrojo y firmeza sus principios, quienes mantienen intacta su dignidad, aún a pesar de las humillaciones y agresiones del régimen y del riesgo a sus propias vidas. Estos venezolanos son la razón de mi profunda confianza en nuestro futuro cercano.
L.P: Pero ante una crisis humanitaria y la implosión de un Estado mafioso –como Ud lo califica-, la respuesta de la MUD son unas primarias parciales, controladas por el CNE?
MCM: Los venezolanos hoy tenemos muy claro que las dictaduras se enfrentan todos los días, en todos los planos democráticos, incluyendo el plano electoral. Pero en esta lucha electoral, hay que asumir que el régimen lo que persigue es su legitimación, empleando las trampas y fraudes más perversos y creativos. Su propósito es lograr la estabilización del régimen, como ha ocurrido en el pasado, violando la soberanía popular. Por eso, nuestra aproximación a las elecciones parlamentarias debe ser con plena conciencia de las intenciones del régimen. Ellos saben muy bien que una enorme mayoría clama por un cambio profundo, que no basta con un cambio en la Asamblea Nacional, ni siquiera el de Maduro; se requiere un cambio completo del régimen que ha sumergido a Venezuela en la pobreza, la violencia y el miedo.
Hoy hay elecciones primarias de las fuerzas democráticas en una treintena de circuitos en el país. No son las primarias que aspirábamos. Considero que teníamos que haber organizado las primarias con la sociedad civil, sin la injerencia del CNE. Que debían haber tenido lugar en todo el país, para todos los cargos, diputados nominales y en lista. Y que debían hacer sido realizadas con un proceso manual, sin captahuellas y con cuadernos de votación en papel.
Sin embargo, hoy invito a todos los ciudadanos a salir a la calle. Incluso si en su circuito no hay primarias, los invito a que vayan a acompañar a quienes si votan, en algún circuito cercano. En primer lugar, vayamos a votar para demostrarle al régimen que no le tenemos miedo. En segundo lugar, votemos para que al CNE le quede claro que no estamos dispuestos a tolerar ni una trampa más y que acudiremos a verificar las condiciones que han impuesto en este proceso. Y en tercer lugar, salgamos a votar para que la MUD entienda que los venezolanos queremos elegir a nuestros representantes. De ahora en adelante, todos, todos, los candidatos a cargos de elección popular deben ser escogidos por la gente.
Estas primarias ocurren en términos que no son los correctos; hemos llegado a este punto porque no hubo la firmeza necesaria frente al CNE, el cual nuevamente pretende desconocer la voluntad de la mayoría. A los venezolanos les reitero que frente a este régimen, no basta con votar, hay que ejercer toda la fuerza ciudadana desde hoy para lograr que el CNE tenga que aceptar las condiciones para que en el ejercicio libre del voto se exprese la soberanía popular. De lo contrario, debemos prepararnos para desnudar su más monstruosa violación. Esta experiencia con las primarias de la unidad debe constituir un valioso y claro aprendizaje de cara a las elecciones parlamentarias.
Las fuerzas democráticas, hoy inmensamente mayoritarias, no vamos a aceptar que el régimen nos imponga los espacios, las formas y los términos de nuestra lucha. Es la hora de asumir la magnitud del riesgo, de la urgencia y de nuestra fuerza. Hoy a votar, y a luchar, como todos los días! (lapatilla.com)