El Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, desestimó el miércoles la oferta del gobernante Nicolás Maduro de realizar elecciones de gobernadores este año para apaciguar el creciente descontento social, señalando que la propuesta no librará a los venezolanos de la dictadura que padecen.
Por Antonio María Delgado / El Nuevo Herald
“Las elecciones regionales son una solución cosmética”, manifestó Almagro en una entrevista con el Miami Herald y el Nuevo Herald.
“Tienes un golpe de Estado (en Venezuela), tienes una dictadura, tienes la ausencia de libertades fundamentales, tienes al sistema judicial secuestrado por el poder ejecutivo, tienes la desarticulación total del poder legislativo, tienes unas crisis humanitaria, y para todo eso la solución no son elecciones regionales”, enfatizó.
El secretario general también responsabilizó a Maduro personalmente por las personas que han perdido la vida en los últimos días por la represión a las manifestaciones de protestas organizadas en su contra, incluyendo la del miércoles, día en el que cientos de miles de venezolanos salieron a la calle, en lo que es visto como la mayor protesta en la historia reciente del país.
Almagro conversó con el Nuevo Herald un día después de haberse reunido con el ex presidente dominicano Leonel Fernández, uno de los cuatros ex mandatarios que han estado promoviendo la estrategia de Maduro de involucrar un proceso de diálogo que conllevaría a desarticular las protestas.
Una de las ofertas colocadas bajo la mesa por Maduro es permitir finalmente la realización de las elecciones de gobernadores que el país debió haber sostenido en diciembre a cambio de que la oposición enfríe la calle.
Pero Almagro advirtió que la única solución que tiene actualmente la crisis venezolana es la realización con la mayor brevedad posible de elecciones generales, que conduzcan a un verdadero cambio del sistema de gobierno.
“Lo que el país necesita es democracia y la democracia tiene que venir a través de elecciones generales y devolverle al pueblo el poder de decidir”, manifestó Almagro.
La conducción de elecciones regionales no es suficiente para propiciar ese cambio.
Adicionalmente, persisten dudas sobre si el régimen respetaría el resultado de esas elecciones, dado que hasta el momento ha destituido a cinco alcaldes de la oposición electos en comicios.
Al hablar sobre las conversaciones que sostuvo con Fernández, Almagro dijo que estas fueron muy cordiales, pero que ambos mantienen sus diferencias sobre cómo atender la crisis venezolana.
Fernández, junto al ex presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, el de Panamá, Martín Torrijos y el de Colombia, Ernesto Samper, han estado promoviendo el diálogo entre las partes como el instrumento para desactivar la crisis venezolana.
Pero ese proceso no llegó a ningún lado, dijo Almagro.
“La cosa es que esa fase ya llegó a su fin. Ya no hay nada más que hacer sobre eso. Fracasó en todos sus términos. Es necesaria una nueva etapa”, manifestó.
Almagro, quien elaboró un duro informe sobre el colapso de la democracia venezolana que está sirviendo de base para la activación de la Carta Democrática Interamericana, rechazó las declaraciones emitidas en los últimos días por el embajador de Venezuela ante la OEA, Samuel Moncada, quien acusó al secretario general de participar en un presunto golpe de Estado organizado por Washington.
“Este lugar [la OEA] se está usando como sala de comando para estimular la violencia de Venezuela, y el secretario general y los países [que quieren mediar en la crisis] son parte de ese complot”, afirmó Moncada el miércoles durante una sesión ordinaria del Consejo Permanente de la organización multilateral.
“Hay perfecta coordinación entre lo que dice un grupo de países aquí y lo que pasa en Venezuela, y el secretario general es el operador, no el que manda, porque el que manda es el imperio, es Estados Unidos”, agregó,
Almagro dijo que la actuación de Moncada es vergonzosa a título personal y profesional.
“Está defendiendo una dictadura. Está defendiendo las violaciones de los derechos humanos en su país. Eso es vergonzoso. Debería sentir vergüenza por estar haciendo eso. Porque lo que tenemos hoy en Venezuela es gente en las calles, desarmada, que está demostrando que no están contentos con este gobierno. Y han sido abaleados y asesinados por hacer eso”, dijo el secretario general.
“No hay un golpe de Estado en Venezuela, no hay una intervención. Nadie está bombardeando a Venezuela, lo que tenemos es a la gente pidiéndole al gobierno que se vaya porque el gobierno no es capaz de garantizar sus derechos, o de alimentarlos o garantizar su salud. Entonces, cuando Moncada dice eso [defendiendo al régimen], también ensucia sus manos de sangre”, agregó.