Parlamentarios de Vente Venezuela: Suelten las armas y dejen pasar a la gente

Parlamentarios de Vente Venezuela: Suelten las armas y dejen pasar a la gente

Diputados Vente Venezuela

 

“La nuestra es una preocupación fundamental sobre el futuro de la Fuerza Armada Armada en Venezuela, sabiéndola susceptible de una justificada y legítima crítica debido al rol que ha jugado y juega como soporte de una dictadura que los venezolanos no nos merecemos”, señaló el diputado Luis Barragán.





Nota de prensa

Consabido, el parlamentario intervino esta semana en el debate celebrado por la Asamblea Nacional sobre el empleo de la jurisdicción militar en el intento de acabar con toda disidencia y oposición en el país, recordando lo referido por María Corina Machado en la movilización de las mujeres contra la dictadura: “Suelten las armas y dejen pasar a la gente”.

Vente Venezuela tiene una postura definida y sostenida sobre la institución castrense, expresada en reiteradas ocasiones por su Coordinadora Nacional y por los integrantes de la fracción parlamentaria.

“Luce razonable y cada vez se hará más oportuno debatir en nuestro país sobre la pertinencia de la Fuerza Armada Nacional. Hay quienes de buena fe la creen innecesaria y dispensable, sobre todo a raíz del principalísimo papel que ha asumido para sostener a Maduro Moros y a todo el régimen. Otros, como los afiliados al Partido de la Libertad, la creemos todavía a tiempo de reivindicar, profesionalizada y especializada en el sector defensa y subordinada al poder civil en el contexto de un país de tan particulares condiciones geopolíticas y geoestratégicas. Sólo una transición democrática podrá rescatarla y recuperarla de su actual situación, desnaturalizada y desdibujada a favor de los intereses de la dictadura de Miraflores que es subsidiaria de la dictadura de La Habana”.

Hay quienes estiman que la situación de la entidad armada era antes mejor e, interrogado al respecto, el diputado Barragán expresó: “No deseamos una versión idílica del pasado, pero no cabe duda del significativo prestigio que tuvo la institución castrense y sus integrantes de compararlo con el presente. Además, el debate público y parlamentario, libre y plural, ayudó a corregir muchas de las situaciones que experimentó luego de derrotar a la insurrección auspiciada y financiada desde Cuba, antes y después de la frustrada invasión por Machurucuto. Hoy, todavía estamos a tiempo de salvar y recuperar la institucionalidad castrense antes que la devore el Narco-Estado al que hemos llegado, milicianizándola a la vez que militariza a la sociedad de la que se sirve, en lugar de ser servida”.