Con 21 vueltas para la meta, la aventura del español Fernando Alonso en las 500 millas de Indianápolis tuvo un final inesperado este domingo, cuando su monoplaza presentó problemas mecánicos y le obligó a abandonar la carrera.
AFP
La prueba fue ganada por el japonés Takuma Sato, un expiloto de Fórmula 1, que rebasó en las vueltas finales al brasileño Helio Castroneves.
El debutante Alonso, doble campeón del mundo de Fórmula 1, llegó a liderar la carrera en la mitad de las 200 vueltas al óvalo del Indianapolis Motor Speedway, pero un mal cálculo en la parada de recambio le hizo caer hasta la décima plaza.
El piloto español forzó su coche y en el último tercio fue escalando posiciones con gran habilidad hasta ubicarse séptimo, pero el motor Honda de su auto número 29 explotó en los finales, obligándolo al retiro.
“Sentí un ruido y después un tirón en el coche, y vi cómo empezó a salir humo de atrás. Me dije ‘se acabó’, pero fue bonita la experiencia”, dijo Alonso a la televisora local.
Fue el tercer fallo de los motores Honda en la segunda mitad de la carrera, y Alonso siguió el destino de otros dos líderes frustrados, los estadounidenses Ryan Hunter-Reay y Charlie Kimball.
El conductor de McLaren-Honda Andretti fue recibido por una ovación de pie al salir de su coche.
“Es una pena porque merecíamos terminar la carrera, ¿quién sabe lo que podría haber sucedido?”, añadió Alonso.
“Todo el día fue realmente una gran experiencia, a partir de la presentación de los pilotos esta mañana. La carrera fue muy agradable, nuestro rendimiento ha sido bueno, estábamos en esto, pasé varias vueltas a la cabeza. Estoy sorprendido de haber logrado todo esto frente a grandes nombres de la IndyCar”, insistió.
Alonso pilotó por primera vez un Fórmula Indy hace dos semanas, pero la experiencia ha sido tal que no descarta volver en el futuro al famoso circuito oval de Indianápolis.
“Me sentí competitivo, si vuelvo, sé qué esperar, será más fácil, he disfrutado mucho y ha sido una de las mejores experiencias de mi carrera”, manifestó.
De esta forma se vieron arruinados los sueños del español Alonso en convertirse en el segundo piloto en completar el ‘gran slam’ del automovilismo de velocidad: Gran premio de Mónaco de Fórmula 1, la Indy 500 y las 24 horas de Le Mans.
Las tres carreras han sido ganada hasta ahora sólo por el británico Graham Hill.
Alonso arrancó la Indy 500 desde la quinta posición de la grilla de partida, nada mal para un novato que estuvo practicando unas semanas antes de aventurarse en el circuito más exigente de la IndyCar.
El español de 32 años fue el hombre que puso fin al reinado de Michael Schumacher en la Fórmula 1 y se convirtió en el más joven campeón de la historia en esa división del automovilismo deportivo, al ganar dos veces el Campeonato Mundial.