Largas colas en San Antonio del Táchira para comprar harina de maíz

Largas colas en San Antonio del Táchira para comprar harina de maíz

Desde hace más de un mes no llegaba a los comercios de San Antonio del Táchira la harina de maíz. (Foto/JGH)
Desde hace más de un mes no llegaba a los comercios de San Antonio del Táchira la harina de maíz. (Foto/JGH)

Largas colas de personas, afán y por momentos desorden al tratar de ingresar a pesar que hubo presencia de la Guardia Nacional y Policía, se observaron este jueves en algunos establecimientos comerciales de San Antonio del Táchira a donde llegó harina de maíz de la marca Pan, producto que estaba desaparecido desde hace varias semanas en esta localidad fronteriza. Así lo reseña lanacionweb.com

Además de harina, en algunos establecimientos también vendieron salsa de tomate, mayonesa y otros productos no tan indispensable, pero que la gente debía adquirirlos junto con la harina de maíz. Aunque uno o dos días a la semana, este rubro de la cesta básica llegaba con cierta regularidad a esta población fronteriza. Sin embargo, muchos consumidores manifestaron que desde hace más de un mes no llegaba a los comercios de San Antonio.

De allí que este jueves, la gente hizo cola desde temprano en las puertas de los abastos y mercados para tratar de comprar el rubro alimenticio.





En algunos establecimientos vendieron de un kilo y en otros de a dos paquetes de harina, junto con otros artículos no tan indispensables. Algunos compradores salían de un abasto y de inmediato hacían la cola en otro establecimiento, para tratar de comprar más paquetes.

Debido a la gran cantidad de gente y el afán de otros por querer pasar rápido a comprar, en ciertos establecimientos por momentos hubo desorden, pero la situación fue controlada por los militares de la Guardia Nacional y efectivos de la Policía del estado que hicieron presencia en los comercios.

La venta de harina no se rigió por el terminal de cédula de identidad del comprador. En uno de los principales establecimientos de venta de víveres en San Antonio hubo colas separadas, una para las personas de la tercera edad, otra para los más jóvenes y también hubo trato preferencial para personas con discapacidad, enfermos, mujeres embarazadas y con niños de pocos meses de nacido.

El ansia de la gente por comprar productos venezolanos a precio regulado es palpable cada vez que éstos llegan a San Antonio, pues aunque al otro lado de la frontera hay suficiente oferta, la continua devaluación del bolívar ante el peso hace cada vez más costosos los productos alimenticios colombianos.