Venezolanos siguen muriendo en hospitales por falta de medicamentos e insumos

ACOMPAÑA CRÓNICA: VENEZUELA MEDICINAS - CAR009. CARACAS (VENEZUELA), 25/02/2017 - Fotografía del 24 de febrero de 2017, de pacientes que aguardan en sus camillas la llegada de medicina en un hospital de Caracas (Venezuela). Casi tres semanas lleva una joven de 25 años buscando dos antibióticos para su hermana que padece de bronconeumonía y hasta ahora lo único que pudo conseguir, gracias a una donación, fue una caja incompleta de un medicamento que no es precisamente el que el médico le recetó. Venezuela vive una aguda crisis de desabastecimiento en materia de medicinas desde hace más de dos años y la situación no parece mejorar. Efe hizo un recorrido por unas 15 farmacias ubicadas tanto en el este como en el oeste de la capital venezolana y constató la ausencia de antibióticos, hipertensivos, anticoagulantes y otros. EFE/MIGUEL GUTIERREZ
Pacientes aguardan en sus camillas la llegada de medicina en un hospital de Caracas (Venezuela) Efe hizo un recorrido por unas 15 farmacias ubicadas tanto en el este como en el oeste de la capital venezolana y constató la ausencia de antibióticos, hipertensivos, anticoagulantes y otros. EFE/MIGUEL GUTIERREZ

 

Samuel Becerra contrajo la infección que ya había enfermado a otros en el pediátrico JM De Los Ríos, de Caracas, y al no contar con antibióticos, el niño de 12 años murió, publica El Nuevo Herald.

ANTONIO MARIA DELGADO
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En el Complejo Hospitalario Universitario Ruiz y Páez, en Ciudad Bolívar, al sur del país, lo que escasea es el agua y la salubridad, relata el oncólogo Alberto Cabello. Allí, “se está tratando de hacer una medicina que es peor que la medicina de guerra, porque operar un paciente en un quirófano lleno de moscas, donde hay cucarachas, aguas negras y no hay agua para lavarse las manos, es terrible” relató a la prensa local.

Y en Maracaibo, al Oeste, la escasez es generalizada en el Hospital Adolfo Pons, donde el personal médico no logra hacer nada por sus pacientes. El pasado 27 de mayo, 15 de ellos murieron bajo la frustrada mirada de los galenos. “Los pacientes se mueren porque aquí no hay nada”, relató un médico residente del hospital al diario La Verdad.

El sistema público de salud agoniza por mengua en Venezuela, donde más de la mitad de los quirófanos no están operativos y el desabastecimiento de medicinas en las farmacias supera el 80 por ciento.

Es una situación que ha llevado a la medicina venezolana a retroceder décadas, y que acarrea un elevado costo en vidas para la nación sudamericana.

José Manuel Olivares, presidente de la Comisión de Salud de la Asamblea Nacional de Venezuela, dijo recientemente desde Miami que el colapso del sistema público de salud significa que enfermarse en Venezuela es para muchos de ellos una condena de muerte.

Eso se debe principalmente a que el 90 por ciento de los tomógrafos, mamógrafos, resonadores y laboratorios no funcionan en los hospitales públicos, lo que significa que, en muchos casos, no hay manera de determinar la naturaleza o la extensión de sus dolencias, dijo Olivares en un evento realizado la semana pasada por la Venezuelan American Medical Association (VAMA).

“El que no tiene plata se muere en Venezuela”, manifestó Olivares en una entrevista telefónica.

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