Engelbert Rivero: De la economía informal al emprendimiento en Guacara

Engelbert Rivero: De la economía informal al emprendimiento en Guacara

 

Engelbert Rivero Montenegro @engelbertrivero
Engelbert Rivero Montenegro @engelbertrivero

Hace unas semanas fui participe de un interesante debate en una red social de vecinos referido a la proliferación de buhoneros en la Parroquia Ciudad Alianza, habían opiniones encontradas que se manifestaban en favor de la permanencia de las personas que laboran en la economía informal, en las calles y aceras de este urbanismo, y quienes pensamos que deben abrirse caminos para la solución del problema y así mejorar nuestra calidad de vida la cual anhelamos cuando visitamos municipios mas organizados o incluso quienes han tenido la oportunidad de salir del país, observan en otras latitudes. Ambos puntos de vistas válidos y respetables por cierto.

En la práctica podría definirse la economía informal como una actividad que permanentemente (no me refiero al coyuntural y pernicioso bachaquerismo) desempeña gente en su mayoría honesta, cometiendo un gran error que es incumplir leyes y ordenanzas, podría decirse también que la economía informal no es lo mismo que la economía ilegal, la economía informal es sencillamente ganarse la vida por medio de actividades licitas transitando caminos ilícitos, por ejemplo vender mangos  en una esquina no es un delito, en cambio vender sustancias estupefacientes si lo es, lo que ocurre es que muy probablemente quien vende mango no cumplió todos los requisitos exigidos por ley y por la municipalidad.





La informalidad es un fenómeno político, jurídico y económico:

Político: Porque no se le da la real importancia que tiene este sector que no tiene voz y que en la mayoría de los casos son manipulados por otros intereses.

Jurídico: Porque es clara muestra que el andamiaje legal es muy rígido y en algunos casos desde el punto de vista de ordenanzas es inexistente o han sido diseñadas sin conocer realmente a fondo el problema.

Económico: Porque no se comprende el potencial de este sector y se combate con acciones de suma cero en lugar de ser abordado con políticas públicas especiales sobre todo desde el punto de vista tributario que sean sensibles a esa realidad. En resumen la informalidad es consecuencia de una estructura institucional ineficiente.

Entre las acciones que solo desde el poder político a nivel municipal se podrían llevar a cabo para paliar este dinámico problema destacan:
1. Diseñar mesas de trabajo con objetivos tangibles que permitan conocer entre otras cosas, quiénes se dedican de manera estable a esta actividad y quiénes no.
2. Ejecución de un censo para conocer su real situación socio-económica.
3. Equipar espacios propiedad del municipio con todas las condiciones de infraestructura para que las personas que desempeñan esta actividad la hagan de manera digna: baños, conexión wifi, rampas para personas con diversidad funcional, zonas de carga y descarga de mercancía, agua potable, seguridad, entre otras.
4. Asesorías legales para que formalicen su situación y den el paso de la informalidad al emprendimiento pero a bajo costo.
5. Diseño de una política fiscal que se apegue a la evolución del sector la cual podría comenzar con la aplicación de un tributo lineal mientras formalizan su estado jurídico.
El objetivo es que tanto los derechos de los transeúntes de disfrutar de calles y aceras libres para su uso como lo el de los emprendedores a ejercer su trabajo sea respetado y generen acciones comunes en beneficio de un intereses colectivos como lo es la muy anhelada calidad de vida.

Engelbert Rivero Montenegro

Sec Asuntos Municipales C.E.S (AD) Carabobo

@engelbertrivero