Luisa Ortega Díaz : Yo sigo siendo la Fiscal General de este país

(foto Andreina Flores)
(foto Andreina Flores)

 

Este domingo se llevan a cabo un encuentro en la Universidad Católica Andrés Bello, donde convergen varios dirigentes de la Unidad y del chavismo que han criticado la convocatoria e instalación de la Asamblea Nacional Constituyente, con el fin de debatir ideas en pro de la defensa de la Carta Magna de 1999.

A encuentro, llegó de sorpresa Luisa Ortega Díaz,  fiscal general de la república, quien al iniciar su derecho a la palabra se dirigió a la población para agradecer el apoyo brindado a su persona y al Ministerio Público y reiterando su posición de desconocer la medida de su destitución “yo conozco la remoción, yo sigo siendo la fiscal de este país”; a su parecer “aquí no hay Gobierno” alegando que los gobiernos están hechos “para garantizar la felicidad”.





Reiteró su denuncia por la “persecusión” que le tienen y añadió que no sabe que acciones tomará el Gobierno en su contra al salir del auditorio de la Ucab “por ejercer el derecho político”, al tiempo que llamó a la oposición a no dejarse quitar el espacio en “la Asamblea Nacional” al tiempo que llamó a participar a la oposición en las elecciones regionales.

Ortega Díaz, aseguró que  desconoce cualquier mandato que salga de la Asamblea Nacional Constituyente implantada por el régimen de Nicolás Maduro.

Al salir del encuentro, la fiscal, expresó la ANC fue un “evento viciado de nulidad, ilegítimo, ilegal, luego celebran un evento a espaldas del pueblo, que la propia empresa dijo que habían sido manipulados los resultados, las cifras fueron manipuladas
se hizo un proceso donde los números fueron abultados, los centros electorales estaban vacíos”.

Dijo que tomó nota de las denuncias de 25 instituciones que obligaron a empleados a votar, “si no votaban los quitaban del cargo, los amenazaban, si gozaban de beneficios los amenazaban con quitárselos, tal es el caso de las viviendas y las bolsas Clap”.

Denunció responsabilizo al ejecutivo nacional, especialmente al Sebin de cualquier atentado contra su persona.