Una humillación más es no hacer hallacas en esta Navidad

Una humillación más es no hacer hallacas en esta Navidad

El alto costo de los productos mató la tradición navideña de preparar hallacas. (Foto: José GIl) Los marabinos se preparan para preparar las deliciosas hallacas, algunas personas no saben si van a hacer el contorno del plato navideño como lo es la hallaca, donde manifestaron que los productos para el preparado están muy caros y la situación económica no se presta para prepararlo Foto María Fernández Soila Parra, Levy Pírela, Roberto Arrieta, Lisbeth Castillo Zuli Delgado
El alto costo de los productos mató la tradición navideña de preparar hallacas. (Foto: José GIl)

 

Cómo hacer hallacas en crisis no tiene respuesta. Hasta el año pasado, las familias ajustaban el presupuesto, cada miembro daba un aporte para adquirir los ingredientes pese a que la balanza del ingreso mensual rozaba el 15 por ciento de la canasta alimentaria. Los sacrificios eran colectivos. Así lo reseña laverdad.com

Por Yasmín Ojeda 





En la navidad de 2017, las cuentas en alza se avivan y derrumban tradiciones. Comprar 500 gramos de pasitas a 95 mil bolívares o 300 gramos de alcaparras a 26 mil 500, ingredientes de la hallaca, restarían adquirir un pollo o 20 panes dulce para la cena diaria. Calculo permanente en mente los angustiados responsables del hogar.

Los costos para preparar el plato navideño aumentan el sufrimiento de las familias, así lo lamenta Horacio Rujano, trabajador. Relata para La Verdad su trajinar en el mercado. “Estoy buscando harina, (y) cómo pensar en hacer hallacas si todo está caro. No hay aceitunas, ni bijao. Pensaré en hacer unas paticas de pollo”, suelta entre risas para luego asegurar: “es una humillación para el pueblo. Esto es doloroso. El dinero no alcanza. Este año ni refresco tomaremos”.

Recuerda la algarabía que marcaba el inicio de la preparación. “Todos los años se hacían unas hallaquitas, y te sentabas con la familia. Hacíamos 100 hallacas”, ahora ni un kilo de cada ingrediente puede tener “con los precios como están por las nubes”. Rememorar el pasado aumenta el desconsuelo. “No se puede pensar porque el sueldo no alcanza. Todo va pa’arriba”.

Los gastos en alimentación cada día cambian. Varían por efecto del descontrol en la economía, de la devaluación del bolívar, de falta de producción, de especulación y escasez de productos. Las consecuencias sacuden los presupuestos. Oswaldo Hernández, comprador en el mercado popular, las siente. Tras estimar el total a pagar en verduras advierte: “Aquí no hay inflación imaginaria, es real. Van a tener que pagarnos en dólares porque no se puede. EL bolívar no vale nada”.

Hernández lamenta que ni pan de jamón podrá comprar. El contorno de la cena navideña exhibe precios que superan los 25 mil bolívares, dependiendo del tamaño. “Quién come pan a 60 mil bolívares. Es caro. No se puede. El pan solo cuesta más de mil 200, en diciembre el de jamón pasará los 100 mil bolívares”, cuestiona.