Contexto Venezuela Enero 2018 / Estudio telefónico / Según su opinión, ¿Este acuerdo o en desacuerdo con el largo tiempo que lleva el diálogo o negociación entre el gobierno y la oposición en busca de soluciones políticas y económicas para el país?
Para algunos estudiosos en la temática de diálogos, la diversidad de la valoración la razón aplica y no se impone en críticos momentos históricos. Un buen diálogo reconoce las soluciones a las problemáticas planteadas, en el diálogo o diálogos se revelan en su dinámica buenas y malas intenciones, estados de ánimo, en definitiva, lo que no se puede ver tal vez en su inmediatez, por consiguiente, en ello radica su valor. Ahora bien, un diálogo es también una discusión o contacto que germina con la intención de alcanzar un acuerdo en corto, mediano o largo plazo, según la naturaleza de la crisis. Mientras que negociar es tratar de ponerse de acuerdo acerca de la manera resolver un conflicto o asunto en lo inmediato.
El 30 de Octubre pasado se inició en Venezuela un proceso de diálogo que se viene extendiendo y que se suspendió el pasado domingo después las partes acordaran otro encuentro para el día de mañana jueves. En nuestro contexto nacional, son incontables los continuos debates y críticas incluso acríticas contra de la temática de diálogo entre el gobierno – MUD, casi todas vienen de la oposición, con toda la razón por los precarios resultados, este proceso hasta ahora fallido potenció todos los nudos críticos que impiden un verdadero diálogo sincero, claro y con futuro. Sin embargo, la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) considera con cierta mesura que las señales por parte del gobierno en su tránsito aún son inexistente, lamentable por el laberinto en que se encuentra el país, se reafirma que la salida democrática sigue siendo el adelanto de elecciones generales, con un nuevo CNE, garantice una justa competencia electoral y el voto.
Mientras los radicales “Maduristas” acusa a la MUD de vender “falsas expectativas” incluso darle informaciones sobre los apátridas, este tipo de discurso se orienta con la intención de dividir más a la oposición, estos personajes aseguran ante los medios que todo va por buen camino, en cuestiones horas son negados acuerdos o preacuerdos, ¿Cuál es el verdadero juego político del gobierno?… Queda revelado, Nicolás, entra en contradicciones, no se da por vencido mueve sus piezas del ajedrez con un discurso estratégico donde lo significativo es su proyecto político, su reelección afianzado en su Asamblea Nacional Constituyente, con caracterización inquisidora, se radicaliza, devela ante el mundo su culto por el pensamiento y práctica de la propuesta comunista política – económica de Lenin: “que a veces es necesario dar un paso atrás para poder dar dos adelante y poder avanzar”…seguramente seguirán las reuniones en República Dominicana sin mucha prisa, de pasito, mientras se deteriora la economía y los problemas sociales continúan su configuración compleja hacia una pobreza alcanza el 80% y 15% venezolanos comiendo de la basura.
El gobierno no está interesado en hacer una negociación de verdad, solo quiere dialogar, recrearse que significa ganar tiempo, lo que se requiere negociar la solución a esta crisis. Se debe construir un proceso urgente que resuelva la situación del país, y no un diálogo para mantener en el poder Maduro. Es innegable que gobierno está más débil, pero más violento que nunca, embriagado de la sinrazón, llevándose por el medio a todos los principios y valores democráticos y de justicia sin importarle que el mañana si existe, la teoría de Maduro desconstruir para luego construir está llevando a la ruina país, conectado shock emocional para desarmar el espíritu de lucha de los venezolanos con el objetivo de enfriar las calles, desmoralizar a la oposición… Finalmente enfatizó, mi narrativa no tiene la menor intención de rendirle culto al pesimismo, todo lo contrario.
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