Antes de morir, venezolana reveló nombre de su asesino mexicano en perturbador video

Antes de morir, venezolana reveló nombre de su asesino mexicano en perturbador video

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Kenni Mireya Finol sabía que quien la maltrataba la iba a matar en cualquier momento. Grabó un video en el que tiene cortadas con machetes, heridas abiertas, moretones en los ojos y la boca partida. También una fractura en el brazo izquierdo. Ese día le dijo a la persona a la que le envió el video: “Yo ya me mandé a bajar de todo, metete en las páginas pa’ que veáis”.





Por: Sheyla Urdaneta / El Pitazo

Eso era lo que el hombre que presuntamente la asesinó le pedía, que dejara de promocionarse como scort en las páginas en las que se hacía llamar: “La Muñeca más cara de la vitrina”.

La mujer de 26 años, zuliana, pasó de un barrio en Maracaibo del sector 1 de Mayo a México, en donde trabajaba como dama de compañía. Cuentan sus amigos y allegados que un presunto narcotraficante se enamoró de ella y la presionaba para que dejara la vida que llevaba. La amenazó, la golpeó y al final la mató.

En el video en que la joven le deja al hombre le promete que no saldrá del cuarto en donde está encerrada. “Mirame como estoy. Solo estoy esperando que se me quite un poquito lo desinflamado de la cara. En la boca la pistola, no sé si me la veis, tengo un hueco ahí en la garganta horrible. Me abriste como un hueco horrible”.

El 25 de febrero de 2018 la consiguieron muerta en una calle cerca de un colegio. Le habían rociado ácido en el rostro y le habían sacado los ojos. En la cabeza tenía una bolsa plástica con un precinto en el cuello.

El diario El Universal de México publicó el video y aseguran que cuatro meses antes de su muerte, Kenni grabó videos en los que denuncia y dice el nombre de quien se presume la asesinó.

Desde 2015 vendía sus servicios en la página Zonadivas.com en la que mostraba su cuerpo. Había dejado de ser la muchacha pobre de un barrio de Maracaibo y se había puesto implantes en los senos. Sus ojos verdes eran uno de sus mayores atractivos y sus amigas cuentan que quería ser “como Paris Hilton”.

Entre dos mil y cinco mil pesos mexicanos se pagan los servicios por hora de las personas que se comercializan en esas páginas, explica el portal mexicano. Los amigos de Kenny cuentan que a ela le gustaban “los malandros”.

De hecho, en uno de sus hombros tenía tatuado el apellido Balzán, porque cuentan sus amigas a las que llaman “Las Barbies”, que Kenny fue por un tiempo la mujer de Astolfo de Jesús Balzán, un exreo de la cárcel de Sabaneta de Maracaibo y a quien asesinaron en un enfrentamiento con la policía en marzo de 2014.

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