Kenny Finol era una joven que se distinguía en su barrio como una de las chicas más bellas, “la muñeca más cara de la vitrina”, que finalmente interrumpió su carrera de comunicación social, logró cumplir sus sueños de ropa cara, cosas finas y ayudar a su familia, pero lo logró como scort (dama de compañía de lujo), en México, pero su final fue trágico.
Kenny Finol vivía en el sector Primero de Mayo, en Maracaibo, Zulia. Era una jovencita de cabello negro, de baja estatura y con un físico llamativo.
“Kenny, tenía el cabello negro, era muy delgada y soñó con un cuerpo voluptuoso. Siempre quiso ayudar a su familia humilde y lo logró”, expresó Margarita Fernández, allegada de Kenny.
Aunque fue a cambio de sexo, la joven fallecida lo hizo porque no encontró otra salida, vivía rodeada de personas humildes y siempre llevó a Venezuela en su corazón. Fernández reiteró que Kenny era muy amigable, vivió su adolescencia en fiestas, era conocida en las discotecas de Maracaibo por ser muy “rumbera”.
Finol, pasó de ser pelinegra a una “rubia exótica”, luego de la transformación de su cuerpo a cambio de sexo, todo el barrio quería estar con ella, pero la joven ya no quería estar con todos. Iba más allá, solo buscaba gente poderosa que la llevara donde quería estar.
“Aún estando lejos, la gente del barrio la admiraba, estaban pendiente de cómo se vestía, de sus fotos en las redes sociales y la muerte de ella fue muy dura para todos nosotros”, expresó Fernández.
En febrero, Finol fue secuestrada y su cuerpo lo abandonaron frente a una escuela. Tenía rastros de violación y tortura. Su agresor le quemó el rostro con ácido y luego cubrió su cabeza con una bolsa de plástico y cinta adhesiva.
El gobierno de México emitió un comunicado a la familia en el que emitieron sus condolencias.
Con información de Noticia Al Día