“Cuando las personas no aprenden las herramientas de juicio y se limita a seguir sus esperanzas, las semillas de la manipulación política se siembran” Stephen Jay Gould
El partido UNT va a asumir en los próximos días el compromiso moral, junto al Presidente de la Asamblea Nacional Omar Barboza y la mayoría de los diputados, de aprobar el enjuiciamiento a Maduro solicitado por el TSJ legítimo en el exilio.
A pesar de esa votación mayoritaria a favor del juicio contra el Presidente, no se logrará nada, más allá de cumplir con un deber de honor para con el pueblo venezolano. Por todos es bien sabido que el secuestro de las instituciones es inminente y es poco probable que la decisión del TSJ se establezca en la práctica.
Aunque suene pedante, injusto, odioso y hasta poco esperanzador, es significativo aclararle a la opinión pública este punto. Ya está bueno que se sigan sembrando esperanzas en la población, es antipático decir la verdad, pero debemos hablarle a la gente con sinceridad, aunque sea odioso expresar lo que el pueblo no quiere asumir.
Al darse este escenario se evidencia la grave fractura institucional que existe en el país y causará obviamente un efecto negativo en la imagen internacional que terminaría de deteriorar el perfil del llamado “gobierno” venezolano.
El propósito de esta acción es demostrar la inexistencia del ejercicio de la Democracia que permita el estado de derecho, en consecuencia, pudiera ser digno en lo legítimo de una medida que lo separe del cargo.
La descomposición de las instituciones en Venezuela, por parte de un Estado delincuente, tiene como fin el irrespeto a los DDHH y los tratados internacionales, y por ello incumplen las decisiones de organismos internacionales como la ONU y OEA, encargados de preservar la paz y el orden mundial y regional.
La realidad es esta, mientras la crisis económica y de salud inducida por el régimen permite la sobrevivencia de quienes aún luchamos con acciones por ver una patria libre, en pleno ejercicio de sus funciones democráticas, también luchamos por el desconocimiento total de este sistema a través del rescate de la institucionalidad y la Constitución.
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