Opositores piden cese de represión en Nicaragua tras 10 muertes en protestas

Agentes de la policía antidisturbios chocan con estudiantes frente a la Universidad de Ingeniería durante una protesta contra las reformas del gobierno en el Instituto de Seguridad Social (INSS) en Managua el 20 de abril de 2018. Un manifestante y un policía fueron asesinados en la capital nicaragüense Managua después de las manifestaciones La reforma de las pensiones se tornó violenta la noche del jueves, dijeron las autoridades. Las muertes se produjeron después de las protestas de opositores y partidarios de una nueva ley, que aumenta las contribuciones de los empleadores y los empleados, mientras que reduce el monto total de las pensiones en un cinco por ciento, sacudió la capital por segundo día consecutivo.  INTI OCON / AFP
Agentes de la policía antidisturbios chocan con estudiantes frente a la Universidad de Ingeniería durante una protesta contra las reformas del gobierno en el Instituto de Seguridad Social (INSS) en Managua el 20 de abril de 2018. Foto: INTI OCON / AFP

 

El denominado Frente Amplio Democrático (FAD), integrado por dirigentes de la antigua principal fuerza opositora de Nicaragua, pidió hoy el cese de la represión de las protestas callejeras que han dejado al menos 10 muertos, cerca de un centenar de heridos y daños a comercios y otros inmuebles.

“Mientras (Daniel) Ortega habla de diálogo, en estos momentos estudiantes y pobladores continúan siendo agredidos, reprimidos por las fuerza del régimen”, denunció ese movimiento en una declaración este sábado.





Según el FAD, un movimiento que no tiene personalidad jurídica, “desde el primer día hubo orden de reprimir ferozmente a las protestas estudiantiles”.

“Pandillas armadas acompañadas de los antimotines y fuerzas de la Policía Nacional, en un verdadero ejercicio de terrorismo de Estado han ejecutado los actos más atroces de los últimos años”, sostuvo.

Denunciaron que el viernes “nuevas fuerzas y grupos de choque organizados y armados por el Gobierno salieron a la calle a realizar todo tipo de acciones vandálicas, con el deliberado propósito de culpar a los jóvenes estudiantes y pobladores que han protestado y justificar así, la militarización del país”.

“El Ejército de Nicaragua y los antimotines deben volver a sus cuarteles y los asesinos y demás violadores de los derechos Humanos deben ser sancionados”, anotó ese movimiento.

El presidente Ortega culpó hoy a “pequeños grupos de la oposición”, cuyo nombre no especificó, de ser los causantes de esas revueltas.

En una aparición pública, tras más de tres días de silencio desde que comenzaran los enfrentamientos violentos por las reformas de la seguridad social, Ortega acusó a la oposición de “buscar en Estados Unidos a los grupos políticos más extremistas para poner quejas y financiarse para sus planes de desestabilización” y “para la conspiración” contra su Gobierno.

“Que se vayan a conspirar para promover la violencia en nuestro país no tiene perdón de Dios,es algo terrible”, comentó.

El mandatario también responsabilizó a estos grupos de manipular a los grupos de estudiantes movilizados a través de las redes sociales y les culpó de incorporar a delincuentes y pandilleros en las manifestaciones para criminalizar la protesta.

“El objetivo de los que dirigen estos planes criminales es destruir la imagen de la Nicaragua buena que tanto nos ha costado construir y sembrar el odio”, sentenció.

Mientras el gobernante daba su mensaje a la Nación seguían los enfrentamientos en Managua entre manifestantes y la Policía y los afectos al Gobierno, una escena que se repite desde el miércoles pasado.

EFE