Abstenerse no es resignarse, por Freddy Paz

Abstenerse no es resignarse, por Freddy Paz

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Soy un confeso demócrata, he dedicado mi vida al servicio de mi gente y a la defensa de la democracia en Venezuela y como tal creo en el voto como única herramienta de participación y democracia que permite a los ciudadanos dirimir diferencias políticas e ideológicas dentro del marco de la paz necesaria que debe reinar en todas las naciones.

Pero hablo del voto dentro de un sistema político sano, justo, democrático y con igualdad de condiciones para que la alternabilidad pueda ser posible dentro del País, con garantías, reglas claras y equitativas para los procesos electorales. Eso no es lo que tenemos hoy en Venezuela, las condiciones no son las mismas, el ventajismo es grosero.





Tenemos una nueva elite política que tiene 20 años ostentando el poder absoluto en la Nación. Una elite que se aferra al poder y a los privilegios derivados del mismo con todas sus fuerzas y todos los recursos de que dispone para tal fin.

Los venezolanos enfrentan un proceso electoral amañado, diseñado por quienes gobiernan para continuar atornillados al poder. Saben que en elecciones libres y transparentes.

perderían de calle, porque engañaron al pueblo, fracasaron, y perdieron el favor popular. Sumieron al país en la más grande crisis, de la cual se tenga conocimiento en la historia republicana.

Un proceso electoral diseñado exclusivamente para mantenerse en el poder, con solo 20 días de campaña, que hacen imposible para la oposición cumplir con todas las fases de una campaña electoral.

Son unas elecciones dónde la oposición debe enfrentar a funcionarios del CNE, miembros de mesa y coordinadores de centros de votacion militantes del PSUV; un Plan República parcializado con el candidato oficialista, toldos rojos desde donde se dirigen todos los ilícitos electorales, voto asistido violatorio de lo permitido por ley; testigos opositores amenazados; registro electoral secuestrado y contaminado; migraciones sin sentido; cedulaciones múltiples, carrusel del voto, bonos, rifas, cajas clap; así como otras cositas más que ya los venezolanos conocemos.

El gobierno necesita participación en las urnas para legitimar la farsa y así poder “desmentir” y condenar las acciones de la comunidad internacional que ha venido pronunciándose contundentemente acerca de la crisis que vive nuestra nación y de la ilegitimidad de éstos comicios.

Aquí no se trata de quien es el candidato. La única opción de vencer el fraude electoral es ir absolutamente todos unidos con una sola candidatura y una sola estrategia, pero tristemente, eso no lo hemos logrado, por razones diversas. Y bajo estas condiciones de ventajismo para el 20M, ningún candidato sería capaz de obtener una victoria, que además estaría condicionada por la permanencia del actual presidente en el poder hasta enero de 2019, y con una ANC bajo su control, para torcer cualquier milagro electoral.

Tenemos la experiencia del 2015 ganada la AN, los diputados salientes sesionaron de manera continua hasta fin de año para aprobar a troche y moche un conjunto de decisiones favorables al oficialismo y desconociendo la voluntad popular.

El pueblo llano, aguas abajo en este momento, se encuentra ajeno a la diatriba política, está literalmente “pasando hambre” y lo que reclama son soluciones.

Con el mayor respeto por la opinión y las posturas de algunos sectores de la oposición que piensan distinto, yo considero que abstenerse es el mayor acto de resistencia cívica que podemos aplicar en este momento, para dejar al descubierto el simulacro electoral, y desnudar todo el tinglado montado por el gobierno para perpetuarse en el poder y así hacer interminable el sufrimiento de los venezolanos que vivimos en una olla de presión.

El compromiso tiene que ser lograr condiciones electorales justas, un CNE equilibrado, privacidad del voto y respeto por los resultados.

Este 21 de mayo nos necesitamos absolutamente todos, para seguir luchando contra la injusticia que tiene acorralada a nuestra Venezuela. Abstenerse no es resignarse, es una forma de lucha democrática y en paz.

Freddy Paz
@freddyspaz