Juan José Moreno: Nicolás, ¿Por qué no te vas?

Juan José Moreno: Nicolás, ¿Por qué no te vas?

thumbnailjuanjosemoreno

Con el respeto que no se ha ganado, ya es hora de preguntarle al presidente Maduro hasta cuándo prolongar este sin sentido en el que se ha convertido su mandato, tan incompetenteque ha tenido que solicitar apoyo para mantenerse a una institución como las fuerzas armadas cuya experiencia en el manejo de los asuntos de Estado ha sido, particularmente en Venezuela, comprobadamente errática. Solo revisemos el nefasto expediente que exhiben para entender su ineficiencia en todas las tareas que se le han encomendado durante el actual Gobierno, y que muchos de sus altos funcionarios han sido acusados de participar en actos nada santos como la corrupción y el narcotráfico.

Por Juan José Moreno / @JJMorenoA





¿Porqué, Presidente, no atender el llamado claramente constitucional de una demostrada mayoría que reclama su derecho a revocar y elegir a sus gobernantes? Váyase en la paz que muy respetuosamente le reclama una comprobada mayoría de venezolanos, y permita esa transición que de manera pacífica pero desesperada le exige este sufrido pueblo, hoy privado de las condiciones mínimas de subsistencia, mientras usted y su entorno se dan el lujo de despilfarrar los recursos financieros y humanos de los venezolanos, entre muchos otros privilegios en viajes inútiles al exterior, costosas prendas de vestir, escoltas y permanentes concentraciones de personas a quienes se les ofrecen todas las comodidades y logística requeridas para aplaudir sus vacios, latosos y muy ofensivos y vulgares discursos.

¿Es que aún, señor Presidente, no ha sido usted capaz de interpretar el significado de un resultado electoral que el pasado 6 de diciembre y lo más reciente, la contundente expresión de voluntad de cambio que colmó las calles de Caracas en expresión de reclamoal cumplimiento de la Constitución de la República en materia electoral, para exigir el retorno al disfrute de una calidad de vida que se le ha venido arrebatando en el curso de estos traumáticos 17 años de régimen castro-comunista que su merced lidera?

Agarre usted sus maletas, señor Presidente, y comparta el camino de sus defenestradas colegas de Argentina y Brasil, a quienes la madurez democrática de sus pueblos se las cantaron claro, para cobrarles desaciertos y corruptelas que, como se ha denunciado en algunos casos tanto en esos países como en Venezuela, salpican a su propio Gobierno.

Asuma definitivamente, señor Presidente, estos hechos y evite al pueblo más sufrimientos. Devuelva el respeto que siempre, hasta el arribo del chavismo al poder, habían tenido las instituciones fundamentales del Estado, como ese poder electoral (Consejo Supremo Electoral) que acató la decisión de aquella mayoría que en su momento permitió el arribo a la propia Presidencia de la República al golpista que fue Hugo Chávez, y de una Fiscalía, un Congreso Nacional y una Corte Suprema de Justiciaque decidieron la expulsión de la Presidencia y prisión de Carlos Andrés Pérez. ¿Quién pudiera imaginar en estos momentos un proceso para levantar una investigación, enjuiciamiento o condena a un alto funcionario de alto rango que haya sido encontrado culpable de un hecho contrario al interés nacional, si como es sabido, por orden del propio presiente Maduro, ministros señalados con contundentes pruebas de corrupción, se dan la cachaza de desatender las convocatorias de la Asamblea Nacional para rendir cuentas?

Esto, señor Presidente, no es democracia; este país le quedó muy pequeño, especialmente porque además de no poseer las condiciones mínimas para ejercer tan alto cargo, se ha rodeado de personajes que nada le aportan a su gobierno para atender las exigencias de un país cuyo proceso de desarrollo quedó paralizado desde el mismo momento que arribó el chavismo al poder. Hay quienes aseguran, que Venezuela no ha entrado aún al siglo XXI. ¿Cree usted, sinceramente, que con “incondicionales” como Diosdado Cabello, Elías Jagua, TareckElAissame, Iris Valera, y la larga lista de militares y civiles señalados por Estados Unidos como corruptos y narcotraficantes, se puede realmente construir “patria”? ¿Puede, de verdad, creer en las recomendaciones de “juristas” como Escarrá que en un momento llamó a manifestantes a una marcha sin retorno a Miraflores y hoy no tenemos dudas en considerar que es precisamente quien le recomienda a usted eliminar la inmunidad a los parlamentarios?

Y una última recomendación, señor Presidente, mientras recoge sus maletas, cuyo equipaje estimamos enésimamente multiplicados en el tiempo que lleva como usufructuario del poder, evite sus discursos cargados de tantas palabras obscenas. Debe recordar que los venezolanos expresan las llamadas groserías como parte de su carácter dicharachero y espontaneo. Nos resulta, por ejemplo, simpático escuchar a un margariteño soltar dentro de su coloquial lenguaje una que otra mala palabra; pero nos resulta inaceptable escuchar de un Presidente de la República, tanta vulgaridad para referirse a sus opositores. Debe recordar, que desde la alta posición que ostenta, el buen ejemplo a los ciudadanos del país, es lo que menos puede esperarse de un mandatario.

Juan José Moreno / @JJMorenoA