Declaraciones de Cruz María de Baduel

Declaraciones de Cruz María de Baduel

General Raúl Isaías Baduel. Foto: Archivo

 

El 27 de junio de 2019 viajo nuevamente el nombre de mi esposo en los diferentes medios de comunicación y en medio de lo poco que he podido enterar a través de las declaraciones que han emitido algunos miembros del Gobierno se acrecienta mi dolor acumulado en los últimos diez (10) años, donde se le acusa de un sinfín de posibles e intangibles delitos y me respondo a mí misma: ese no es el ser con el cual me case, me dibujan a alguien extraño, porque repetitivamente Raúl Isaías nos decía: “LA MEJOR FORMA DE VENGARSE DE LOS MALOS ES TRATAR DE NO PARECERSE A ELLOS”.

Le pido a Dios no me llene mi corazón de odio, de venganza ni de retaliaciones.

La mejor batalla es aquella que se gana sin manchar de sangre las espadas (arte de la guerra).





La salida a esta situación del país debe ser cívica, pacífica, democrática, constitucional y eficiente.

A lo cual puedo agregar: Sorprende al desprendido los juegos de los intereses del mundo político convirtiéndose en sus entrañas en el vomitivo perfecto.

Durante casi dos (2) años estuve semana tras semana yendo a La Tumba, el sótano 5 del SEBIN Plaza Venezuela, lugar pleno de cámaras, equipos de escucha, vidrios tipo espejo, donde mi esposo permaneció muchas semanas incomunicado, en los cuales el consuelo era poder recibir su ropa sucia y los envases de comida y para la semana siguiente repetir la entrega sin poder verlo ni abrazarlo, entonces, me pregunto: ¿Cómo pudo construir todo lo cual se le acusa?, ¿Significa entonces que dicho organismo de seguridad del Estado tiene falencias? , no es mi concepto.

Bien conocen ustedes a Raúl Isaías Baduel y sé que jamás sería partícipe de algo semejante. La vida es un regalo maravilloso del Creador.

Quiero expresar ante mi país que al que amo profundamente y ante el resto del mundo que continúo preocupada por la vida de mi esposo, el cual no he podido ver desde el 06 de junio, como tampoco conocer donde se encuentra, ni su estado de salud.

Por lo cual reitero mi llamado a las instituciones de los DD.HH para que se avoquen a una investigación exhaustiva.

Pido a Dios Todopoderoso nos bendiga a todos. En espera de Justicia, me despido

CRUZ MARÍA DE BADUEL