Los casos positivos del nuevo coronavirus han aumentado de uno hace una semana a 33 en el territorio caribeño francés de ultramar de Guadalupe, mientras que en Martinica han pasado de 10 a 15, según informó la Agencia Regional de Sanidad.
Pese a que anoche las autoridades de Guadalupe indicaron que la cifra era de 27 casos, este miércoles revelaron que el número había subido hasta 33.
Uno de los 33 se encuentra en estado crítico.
El número en Guadalupe, advirtió la Agencia Regional de Sanidad, subirá “exponencialmente” y podría llegar pronto a ser una situación “epidémica” si sube a 38.
En declaraciones a medios locales, la directora general de los servicios sanitarios de Guadalupe, Valerie Denux, dijo que “hay que mantenerse alerta. Si la crisis aumenta tendremos dificultades”.
En la vecina isla francesa de Martinica, donde hasta el domingo hubo 10 casos positivos y un fallecido, el número de casos confirmados para el miércoles aumentó a 19.
Medios locales informaron que se trata de una mujer de 80 años que vivía en el sur de Martinica y que tenía patologías previas.
Había estado en contacto físico con un miembro de la familia que había hecho un crucero días antes.
Fue hospitalizada por mostrar síntomas del nuevo coronavirus y tener patologías anteriores.
Sus familiares han recibido instrucciones de permanecer encerrados en casa.
En el caso de Guyana los casos permanecen en 11, San Bartolomé son dos y San Martín tiene un nuevo caso en la parte holandesa de la isla.
Francia mostró esta semana su respaldo a la propuesta de la Comisión Europea de cerrar las fronteras exteriores comunitarias durante 30 días para frenar la expansión del coronavirus y condenó las decisiones no coordinadas sobre el cierre de las internas.
Las autoridades francesas recalcaron que los controles en las fronteras interiores “deben preservar el funcionamiento del mercado único”.
Macron también transmitió el compromiso de Francia de cara a un regreso “rápido y coordinado” de los ciudadanos europeos que actualmente se encuentren fuera de la Unión y quieran volver a su país.
EFE