El asesinato del médico colombiano Edwin Arrieta Arteaga continúa generando bastante consternación en el país, después de que su cuerpo fue hallado desmembrado el pasado 6 de agosto dentro de un contenedor de basura en la isla de Koh Phangan, ubicada en Tailandia.
Por: Semana
Igualmente, la Policía de ese país confirmó este martes que la muerte del colombiano no fue un accidente, como lo quería hacer pasar la defensa de Daniel Sancho, confeso asesino del cirujano colombiano, sino que fue una acción premeditada, por lo cual pedirán la pena de muerte contra el español.
“Hemos consultado al fiscal sobre algunas de las pruebas, y son suficientemente consistentes para acusarle de asesinato premeditado, lo que conlleva la pena de muerte. Sancho dio un puñetazo a Edwin y lo golpeó en el fregadero. Cuando estaba muerto, lo cortó en pedazos. No fue un accidente. Estaba planeado”, precisó.
Europa Press, por otro lado, informó que el chef ya sabe que la Policía tailandesa solicitó formalmente la pena capital para él por el asesinato y descuartizamiento del profesional de la salud.
De acuerdo con la agencia de noticias, al parecer, antes de que se lo comunicara personalmente su abogado en Tailandia, Khun Anan, el ibérico se habría enterado por la televisión local, donde su caso está teniendo un gran impacto mediático.
“Este miércoles, el hijo de Rodolfo Sancho ha vuelto a prestar declaración policial en presencia de su abogado durante más de dos horas en la prisión de Koh Samui y ha sido El programa del verano el que ha revelado cómo se encuentra anímicamente y cómo se ha enterado de que podría ser condenado a la pena de muerte”, indicó inicialmente.
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